viernes, 23 de enero de 2015

A modo de presentación (o la paternidad no es ni lo que dicen ni lo que parece)


El próximo lunes Bebé cumplirá tres meses, rayos...tres meses ya. Con Esposa nos parece que ha pasado una eternidad y que algo hemos aprendido...bueno, en realidad sentimos que no tenemos idea de nada, pero por lo menos hemos hecho que Bebé este sano y el SENAME no nos haya venido a buscar (logro desbloqueado :D ). En vista de esto, se nos ocurrió compartir algunas experiencias, lejos de los clichés de revistas tipo "Padres Hoy" y panfletos similares, así que si usted espera encontrar aquí comentarios como "Es que un hijo te llena la vida" o quejas del tipo "Un hijo no te deja tiempo para nada" no lo hallará, por qué vamos...si usted necesitó un hijo para darle sentido a su vida, tenía usted un grave problema de autoestima, o de vocación...o de sentido, y si tiene un hijo y no tiene tiempo para nada ¿Cómo es que está leyendo este blog? no sea mentirosillo y reconozca que le cuesta organizarse. La idea es ser realistas y mundanos y sobre todo IMPERFECTOS, por que si de algo estamos orgullosos con Esposa es que vivimos más cerca de Yungay que de la perfección (es cierto, vivimos en un minimicrodepto cerca de Yungay), cosa que no pretendemos cambiar en el mediano plazo.

Una de las primeras cosas de la que Ud. NO debe sentirse culpable como papá joven, y sobre todo primerizo es de jugar con su brocacochi como a Ud. mejor le parezca. Si, si..es en serio. Hay chorromil "expertos" que te hablaran del apego, de la estimulación neurochurumbélica y de como criar niños de quien sabe que color (tipo indigo y cosas asi), sin incluir a la tropa de OFAs (Opinólogos Familiares Amateurs, ya sabes, esa gentecita que a veces conoces y a veces no que se siente con el derecho de decir cualquier cosa sobre la forma en que haces lo que sea con Bebé), que bombardean tu mente y la de Esposa de las formas mas imaginativas posibles, ya sea subiendo "chistes" a facebook o hablando estupideces en la micro o el metro.

Amigo, amigo papá joven, cumpa, perrito, mi guacho..no sea pollo y recuerde que en primer lugar el cabro chico es suyo (o así lo decidió Ud. lo que es otro tema) así que, si Ud. ve que la guagua en cuestión es feliz colgando de una pata y Ud. se siente bien con eso y no significa un peligro para nadie, pongale bueno y aproveche ahora que puede tomarlo de las patas, mire que la vida - y la paternidad- es muy corta como para entender a Hegel, y sobre todo para andar haciendo caso a la cantidad de estupideces que le dirán a lo largo del proceso.

P.d. Aproveche el solcito y pasee a su brocachochi que eso de las vitaminas si es verdad.

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